El Palacio de Congresos de Toledo saldrá 10 millones de euros más caro de lo previsto.

El nuevo Palacio de Congresos de Toledo (que será conocido como El Greco) costará finalmente 61,6 millones de euros, un 20% más de lo previsto inicialmente por el Ayuntamiento (se estimaba que su coste sería de 51 millones). Pese a que el proyecto inicial estimaba igualmente un recinto ferial en Safont y un remonte mecánico que uniera al recinto ferial con el Palacio de Congresos, ambas obras fueron al final suspendidas por falta de dinero y Toledo sólo tendrá un nuevo y bonito edificio seis años más tarde de lo previsto.

Es evidente que los diversos contratiempos que suelen acaecer en las obras públicas provocan que el presupuesto original de un determinado proyecto finalmente no sea el que debe financiarse una vez han finalizado todas las etapas del proceso y se ha colocado el último ladrillo. Pero una cosa muy diferente es que un presupuesto no sea finalmente el previsto por un margen considerable y otra muy diferente que se prometan tres obras importantes y luego sólo se realice una, y además de forma tardía y excesivamente costosa. Por supuesto, esto no es sólo responsabilidad del actual gobierno local del PSOE, sino también del Ayuntamiento liderado por el PP que en su día comenzó el proyecto.

Todavía no se sabe la importancia que tendrá o dejará de tener el nuevo Palacio de Congresos para la ciudad de Toledo y la repercusión o fama que podrá coger entre los vecinos de Toledo (como son los casos de la Catedral, el Alcázar o el Ayuntamiento, por citar unos ejemplos), pero mucho nos tememos que durante bastantes años recordaremos el elevado coste del edificio y la promesa incumplida del ferial de Safont (especialmente cuando los toledanos tengan que ir a pie hasta el actual recinto ferial de la Peraleda en las diversas festividades que allí se celebran).