jueves, 1 de agosto de 2013

La Iglesia Católica frente al totalitarismo


PRESENTACIÓN
Por primera vez se publica en castellano la autobiografía del último sacerdote superviviente del campo de concentración de Dachau. Con mucho cariño y agradecimiento a Dios, por su larga vida, ofrecida en condiciones durísimas al servicio de los más débiles, le dedicamos el libro en su cumpleaños número cien y oramos por él y por la Iglesia mártir. También agradecemos a su obispo que le obligó a dejar por escrito el testimonio de una época.
Hermann Scheipers, participó en las Jornadas sobre el Totalitarismo organizadas en la Casa Emaús (Torremocha,  Madrid). En ese encuentro con el Movimiento Cultural Cristiano, vimos la necesidad imperiosa de traducir estos escritos, abriendo así la posibilidad de su lectura a 500 millones de personas hispano –hablantes.
Scheipers pasó de sufrir el horror nazi a vivir bajo la persecución comunista en la parte oriental de Alemania, dominada por la Unión Soviética. Ahora continúa defendiendo a los débiles contra este capitalismo totalitario en que vivimos.
Sin fe, mi vida hubiera estado llena de amargura y resentimiento. Mi compromiso cristiano se ha tenido que curtir en los diferentes totalitarismos. El totalitarismo capitalista ha conseguido vaciar las iglesias. Se mete en el pensamiento como una serpiente invisible. Ridiculiza la religión a través de la propaganda. Un sistema que produce tanta hambre en el mundo para el beneficio de unos pocos, no puede tolerar que los valores cristianos tengan fuerza en la sociedad.
Los totalitarismos se van haciendo más brutales, si no existe una sociedad organizada para evitarlo. Cuando la vida humana deja de ser sagrada, todo es posible. En el capitalismo, el poder se va haciendo señor sobre la vida y la muerte de los hombres. Se va aceptando la eutanasia, el aborto, el hambre en el mundo. Unos pocos se enriquecen a costa de la vida de otros. Los cristianos seguimos siendo hoy un estorbo por la defensa de la dignidad de todo ser humano.
Scheipers nos comentaba las causas de la persecución nazi contra la Iglesia:
1.- La Iglesia había advertido contra Hitler, mucho antes que los demás estados.  En las zonas católicas de Alemania, Hitler obtuvo mucho menos votos que en el resto del país, en las elecciones de 1932 y 1933.
2.- La publicación de la encíclica del Papa Pío XI contra el nazismo en 1937.
3.- Hitler no consiguió doblegar a la Iglesia católica.
4.- Hitler, igual que Stalin, no toleraba una iglesia que obstaculizara su propio plan para salvar al mundo.
 
Si una ley es injusta, es obligación del hombre honrado luchar contra ella. La voz de la conciencia y Dios están por encima de todas las leyes. La era de los mártires continúa, Scheipers es un atleta saltando por encima de las leyes injustas, eso le llevó a vivir en la ilegalidad gran parte de su vida, enfrentado permanentemente al poder.
Que este libro sea un revulsivo para los que queramos compatibilizar nuestra vida burguesa con la fe... y así en este Año de la Nueva Evangelización, volvamos a plantearnos nuestra conversión en profundidad.

Solidaridad.net
 

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