Tomás Gómez se une a la moda del PSOE de arremeter contra la Iglesia Católica.

“Hasta los ateos necesitan a Dios para negarlo”. Esta cita fue pronunciada por Miguel de Unamuno hace ya muchas décadas; pero como sucede siempre con todo aquello relacionado con la religión católica, existen principios que son eternos y que, independientemente del paso del tiempo, siempre tienen validez.

Que el PSOE es un partido anticatólico y anticlericalista no es algo que pille a ningún español de sorpresa. Su historia, y la de España, lo han confirmado sobrada y desgraciadamente (y cualquiera puede informarse acerca de esto si se preocupa de informarse aunque sea un poco).

No obstante, volvemos a publicar otro capítulo más de la eterna actitud maleducada de los políticos del PSOE respecto a la Iglesia Católica para mostrar, nuevamente, el nivel de miseria moral al que pueden llegar algunas personas.

Tomás Gómez, reelegido secretario general del PSOE de la Comunidad de Madrid, ha llamado a su gente a crear un proyecto que haga frente a un “eje del mal” que los progresistas encarnan en el Partido Popular, la Iglesia Católica y los mercados financieros juntos, acusándolos de representar la “intolerancia” y el “egoísmo”. Al igual que Rubalcaba y Chacón, Tomás Gómez aprovechó la gran cantidad de abiertos simpatizantes del PSOE reunidos en torno a su persona para lanzar sus demagógicas y baratas monsergas dignas de principios del siglo pasado.

Parece que Tomás Gómez, aquel mismo señor cuyo partido organizó unas elecciones a candidato de las pasadas elecciones autonómicas de Madrid para relanzar su imagen, olvida (o no sabe) que el Partido Popular es tan abortista como el PSOE, que la Iglesia Católica ha criticado en varias ocasiones al sistema capitalista,  que el PSOE también ha sido un fiel aliado de los mercados financieros y que para “intolerancia” y “egoísmo” no hay más que echar un vistazo a los valores materialistas y libertinos fomentados por su partido en el seno de nuestra sociedad.

Quizá el “nuevo” secretario general del PSOE en Madrid (Comunidad Autónoma) debería dejar de utilizar discursos propios del PSOE de la II República Española y centrarse más en esconder los trapos sucios y las mentiras de su partido, que abultan y huelen demasiado a estas alturas.